Hoy corrí por varios sectores de la ciudad de Caracas. Comencé en el Paseo Los Próceres y terminé en Antímano, muy cerca de donde vivo.
Desde hace mucho tiempo he tenido la necesidad de variar las rutas en las que normalmente corro. Correr siempre en el mismo lugar me aburre demasiado y me hace perder las ganas de correr.
Ahora que me uní al club Oko Runners, esa sensación se intensifica mucho más porque entrenamos dando vueltas en una ruta de menos de 2Km de recorrido. Es en el Paseo Los Próceres, que es bellísimo e ideal para correr en casi todos los aspectos, pero tiene un recorrido muy corto.
Por eso decidí correr hoy en una ruta larga que comenzara por el Paseo Los Próceres, pero que pasara por muchos más lugares.
Comencé con una sesión completa de calentamientos y estiramientos porque sabía que sería un entrenamiento intenso. Tomé algunas fotos para compartirles el colorido y la iluminación particular de la zona.
Di una vuelta y seguí corriendo por Santa Mónica. Esta zona estaba muy oscura, pero había mucho tráfico y las luces de los carros me ayudaron a ver el piso. Iba con mucho cuidado porque las vías eran muy irregulares y me preocupaba caerme. Eso me permitió correr hasta la Universidad Bolivariana de Venezuela sin percances.
Ahí crucé hacia la Av. Principal Colinas de Bello Monte. Pasé por el emblemático edificio Ciudad Banesco y muchos otros a los que no pude grabar. Esta fue una de las partes más solitarias de la ruta.
Al terminar la Av. Principal Colinas de Bello Monte, crucé a la izquierda para subir por el Puente de Las Mercedes. Esa zona estaba super iluminada y había vigilancia policial.
Seguí subiendo. Pasé por Chacaíto y subí por la Calle El Valle, rodeando el Country Club, hasta llegar a la Av. Libertador.
Recorrí gran parte de la Av Libertador. Esta fue la primera vez que sentí que estaba corriendo peligro real. Es una zona muy oscura y concurrida por muchos indigentes y drogadictos.
Crucé a la derecha para subir por la Av. Principal de Maripérez. En la estación de servicio Maripérez crucé a la izq. para correr por la Av. Andrés Bello.
Casi toda la Av. Andrés Bello era el mismo escenario de oscuridad, basura e indigentes. Estaba muy alerta en todo ese sector.
Al terminar la Av. Andrés Bello, mejoró un poco el escenario cuando pasé por el Sambil de La Candelaria. Muchísima gente entraba y salía de ese centro comercial caminando y en vehículos. Toda la zona está bien iluminada.
A partir de ahí entré en la Av. Urdaneta. Aunque esta Avenida también es muy sucia, tiene buena iluminación en casi todo su recorrido y había mucha gente caminando por sus aceras.
Esta Avenida termina con uno ed los Edificios más emblemáticos de esta parte de Caracas: El Banco Central de Venezuela.
En ese punto crucé a la izquierda. Pasé por varias calles hasta llegar a la Avenida Baralt.
Esta fue la parte más desagradable. Extremadamente sucia y llena de indigentes. A pesar de tener relativamente buena iluminación y tráfico vehicular, el mal olor y la sensación de inseguridad es extrema.
Pasé por otra parte muy emblemática de la ciudad: Plaza Caracas.
Al terminar el recorrido de la Av. Baralt, pasé por el Distribuidor Baralt Sur y aproveché de grabar los autos que pasaban por la autopista.
Llegué el Paraíso. Ahí cambió bastante el escenario. Al rededor de la Plaza Madariaga había mucha actividad comercial, principalmente en restaurants y locales nocturnos de varios tipos.
Después de pasar El Parque Naciones Unidas, la Av. José Antonio Páez estaba mucho más sola. Al superar la redoma de La India, se convierte en la Av. Teherán de Montalbán. Mucho más oscura y solitaria. Solo hubo una excepción en el Parque Itagua y otra en la Feria Gastronómica. Ahí aproveché de grabar otro video corto.
Después de eso terminé de recorrer una larga y solitaria Av. Teherán hasta llegar a mi destino: Antímano.
Dudo que vuelva a repetir semejante recorrido nocturno y no se lo recomiendo a nadie porque se corre bastante peligro, pero por ahora me gustó mucho la experiencia.
En Strava pueden ver
la ruta