Entrada al concurso de poesía de literatos | ~Tesoro Divino~

Él abre los ojos y su pensamiento,
lento vuela a lo lejos allá donde un día.
Su padre divino regaló a los hombres,
un ángel celeste que reposó en María.

Oh!!, virgen santa, patrona beata.
Tú, suave pétalo que falta al olivo.
En su calvario eres luz que arrebata.
En su ministerio eres paz y testigo.

Muy pronto camina el pequeño travieso.
Parábola en mano, trazando destinos.
Espíritu noble que sana en su verso:
El odio, el miedo, la envidia, el castigo.

Dolor aferrado a la espina que hiere,
envuelto en cianuro, teñido de espanto.
Él toca la espina, la envuelve en su manto.
Destila el veneno, devuelve su encanto.

Y en última cena de amor y desdicha,
el beso de Judas prepara su pena.
Y aunque en cruz como ave lo condenan,
él entrega su alma y con amor los escucha.