Los trabajos escolares no paran, y aunque suelo guardar las maquetas que hacemos porque "en cualquier momento las puedo volver anecesitar", hace poco mi esposo @rsanchez0308 estuvo haciendo una limpieza en el cuarto que estamos acondicionando para Miranda, y decidí botar algunas que ya tenían un tiempo en casa, lo que fue una muy mala decisión porque a los pocos días me escribió @claudimar para preguntarme si aún tenía una maqueta que hicimos hace unos años para Arturo y Matías, porque César, su hijo menor necesitaba una igual, y por supuesto yo quería llorar, no solo porque Claudi necesitaba la maqueta, sino porque seguramente a Miranda se la van a pedir el próximo año escolar, ya que va para primer año.