-Imagen de Tetiana Grypachevska,Unsplash-Así decidí llamarlos yo, no sé si realmente hay un nombre para esas manchas que uno tiene dentro, esas cosas en nuestro carácter, adheridas como parásitos, que ni siquiera uno mismo soporta cuando emergen.
Algunos podrían incluirlo en la bolsa de defectos, pero yo no..., es que quizás alguna de las manchas, no solo las mías, sino las de cualquiera, pudiera no encajar en esa clasificación.
Pero el problema no está en el nombre que se les pueda asignar, el problema es que están ahí y a veces emergen cuando menos uno quiere o imagina, sin control alguno, en el momento menos oportuno...y crean situaciones complejas y desagradables en nuestro entorno. Por lo general genera rechazo también de quienes nos rodean.